En casa y fuera de ella se pueden presentar diferentes accidentes con las redes eléctricas. Por ello, en Enel-Codensa queremos incentivar una cultura de autocuidado frente a los riesgos eléctricos para que tú y tus pequeños aprendan a usar de forma segura la energía.
¿Qué es un riesgo eléctrico?
Los riesgos eléctricos son aquellos que se originan ante un posible contacto directo con la corriente eléctrica o a través de arcos eléctricos con el cuerpo humano, lo que conlleva a graves lesiones internas o externas en la persona afectada.
¿Cómo prevenir los riesgos eléctricos?
Si quieres proteger a los más pequeños de la familia de los peligros eléctricos, sigue estos cinco consejos:
1. Todo lo relacionado con energía no se debe tocar
Es fundamental enseñarles a los niños por qué es importante la electricidad y que no se deben tocar los tomacorrientes, los bombillos que estén encendidos ni nada que tenga energía eléctrica.
Una buena opción para evitar accidentes es poner protectores en los tomacorrientes o enchufes que no estén en uso. Estos impiden que los niños intenten meter sus dedos u objetos en ellos.
Además, si tienes lámparas en su habitación procura que el bombillo esté fuera de su alcance y explícales que sus peluches, juguetes o almohadas nunca debe estar cerca ni cubriendo la luz.
2. Cuida los cables y las conexiones:
Si tienes muchos equipos conectados en un mismo lugar, evita que los cables se enreden, pues esto puede provocar accidentes. También, fíjate bien que al conectar los cables no se generen chispas, pues estas más adelante pueden producir un cortocircuito.
3. Que los juegos al aire libre sean seguros
Recomiéndales a los niños que si mientras están jugando sus balones, lazos o juguetes entran en contacto con la electricidad, estos no se deben volver a tocar, ya que pueden convertirse en conductores de energía y causar una descarga eléctrica.
4. Lejos de los cables colgando debes estar
Déjale claro a los niños que si fuera de la casa o en una terraza ven un cable de electricidad colgando, no deben tocarlo y deben avisar. Lo ideal es comunicarte con la línea de atención de Enel-Codensa e informar lo que sucede. De esta forma, tanto niños como adultos estarán a salvo.
5. La seguridad es primero y está en tus manos
Por último, recuerda que todas las instalaciones eléctricas son peligrosas. Por ello, sin importar la edad, nadie se debe acercar ni tocar las torres de energía, cables, transformadores, conexiones, bombillas y tomas, pues estas nos protegen y hacen que la energía pase de forma segura.
Estos consejos provienen de Electrón, Protón y Neutrón, los personajes de una historia con la que los más pequeños aprenderán los tipos de riesgos eléctricos y cómo pueden evitarlos.
Además, los niños podrán ser parte de #GuardianesDeLaEnergía, un concurso en el que tendrán la posibilidad de participar a través de Facebook e Instagram, construyendo un final para el cuento, con un dibujo y una reflexión.