“El compromiso del Grupo Enel con el país no solo está relacionado con ser proveedores de energía, sino también con aportar al desarrollo de las regiones donde estamos presentes mediante programas y proyectos a largo plazo de valor compartido, que contribuyan a su fortalecimiento económico. Vimos en esta alianza una oportunidad para seguir aportando a un renglón importante de la economía local, como el cacao, pues el Huila es un jugador relevante en el país, donde ocupa el cuarto puesto como exportador”
Fortaleciendo las cadenas productivas en el Huila
En Enel-Emgesa llevamos más de 20 años presentes en el Huila, apoyando su crecimiento y fomento de la competitividad, no solo con la operación de nuestras centrales de generación, sino también a través del fortalecimiento de cadenas productivas agropecuarias, pecuarias y piscícolas, que constituyen renglones importantes de ingresos y empleo en el departamento. Efecto Cacao, que se lleva a cabo en alianza con la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid), Eafit, Fundación Luker, Luker Chocolate y Fundación Saldarriaga Concha, nos permitirá aportar al desarrollo cacaotero del departamento durante los próximos 30 años a través de la generación de un modelo de desarrollo rural inclusivo.
Para empezar, Efecto Cacao vinculará a siete asociaciones cacaoteras e impulsará diez iniciativas de emprendimiento para familias productoras como parte de su objetivo de brindar soporte a los pequeños productores de cacao del departamento. Pero esto es solo el comienzo, pues el programa también contempla la intervención de más de 750 hectáreas dedicadas al cultivo de cacao en los municipios de Garzón, Gigante, El Pital, El Agrado, Campoalegre y Rivera, y la creación de un cultivo ancla en un área de 120 hectáreas ubicadas en el municipio de El Agrado que donará Enel-Emgesa.
En este cultivo ancla se creará una central de beneficio, en el predio La Escalereta, donde se buscará obtener un perfil de sabor y calidad consistente en la región gracias a un proceso uniforme que comprende la fermentación y el secado del cacao proveniente del cultivo empresarial y de los agricultores vinculados al proyecto. De esta forma, y gracias también al uso de plántulas de variedades élite de cacao, se garantizará un resultado de excelente calidad para la elaboración del chocolate.
La transformación del campo
El representante legal de la de la Asociación de Productores Agropecuarios del municipio de El Agrado (Asoproagrado), Carlos Agustín Losada, dice que para los cacaoteros el tema más preocupante siempre ha sido el precio. Su asociación es una de las siete vinculadas al programa en el Huila, y sus miembros se verán beneficiados también en este aspecto, como bien lo explica él, no porque el precio vaya a subir, sino porque el ingreso va a incrementar al aumentar la productividad. Una de las metas del programa, de hecho, es alcanzar una producción promedio de 800 kilos de cacao por hectárea en los cultivos de los pequeños productores, un 160% más que la producción actual.
“El resumen del proyecto, en una palabra, es transformación. En todo el sentido de la palabra. Transformación en la parte económica y transformación en la parte empresarial como personas”
Para conseguirlo, Efecto Cacao hará un acompañamiento técnico a lo largo de todo el proceso. 800 familias productoras podrán contar con este apoyo que tiene como objetivo último, además de aumentar la productividad, lograr un cambio de mentalidad en los productores para que este nuevo escenario se mantenga a lo largo del tiempo. La idea, como la entienden también en Asoproagrado, es poder convertirse en empresarios gracias a las capacitaciones de Efecto Cacao, pues si bien los cacaoteros saben cómo cultivar la planta, en ocasiones no saben aprovechar bien su producción por desconocimiento del negocio. De esta forma, en Enel-Emgesa continuaremos apoyando el desarrollo del Huila, donde tenemos presencia desde hace 20 años, con proyectos integrales que mejorarán la calidad de vida de sus habitantes durante los próximos 30 años.