Afianzando el rol esencial de los padres en la familia

Hace un tiempo establecimos la necesidad de equilibrar la vida personal y profesional de nuestros empleados, y para lograrlo creamos los Beneficios de Calidad de Vida que, con el tiempo, comenzaron a convertirse en parte de la cultura corporativa de Enel Colombia. Como resultado de estos esfuerzos, hemos recibido reconocimientos como Empresa Familiarmente Responsable, un sello que se otorga a compañías cuyas prácticas promueven dicho balance, y también el Sello de Oro Equipares, que es la más alta distinción en temas de equidad en el trabajo.

En el proceso entendimos que esos beneficios, que históricamente han sido otorgados a las madres, también debían ser utilizados por los hombres y padres de familia de nuestra compañía. Sin embargo, casi de inmediato encontramos un indicador que mostraba que, en una nómina constituida por hombres en su mayoría, no estábamos teniendo el impacto esperado. Los hombres sí estaban haciendo uso de los beneficios ofrecidos, pero en mucho menor medida que las mujeres.

Convencidos que la responsabilidad de los hijos es un trabajo en equipo

Con esta premisa, debíamos lograr que los hombres entendieran que también se beneficiaban, concientizándolos sobre el hecho de que -habiendo adquirido el rol del proveedor del hogar- habían dejado de tener la posibilidad de acompañar a sus hijos cuando se enferman, ayudarlos con las tareas, o acompañarlos a su primer día de colegio.

Fue un gran reto, principalmente porque el tema de inequidad de género viene impreso en las raíces más profundas de esta y casi todas las sociedades. Entonces debimos educarnos al respecto y comenzamos a ver un cambio en la utilización de estos beneficios por parte de los hombres, quienes entendieron que al utilizarlos no solo les permitía a ellos estar más presentes en la vida de sus hijos y en la dinámica del hogar, sino que también sus familias se benefician.

En este camino que hemos empezado a consolidar para empoderar a los padres de familia, está Fernando Torres, padre primerizo de gemelos y responsable de la División de Operación a cargo de todo el sistema de Bogotá y Cundinamarca para nuestros 3.600.000 clientes (un trabajo en tiempo real, 24 horas al día). Él está casado con Mónica Pineda Montes, quien también trabaja en Enel Colombia y hace parte de la Unidad Operativa de Alta Tensión. Se conocieron en la compañía y formalizaron su relación hace casi dos años. Hace un año, cuando quedaron en embarazo, decidieron comprar un apartamento para los tres, pero a las seis semanas supieron que eran gemelos y la noticia cambió todos los planes.

Thiago y Matheo fueron bebés canguro. Nacieron prematuros y por eso estuvieron 18 días en la UCI, mientras lograban continuar su desarrollo. Bajo estas condiciones, Fernando hizo uso de un beneficio que le permitió estar presente junto a sus hijos y su esposa durante un tiempo que fue determinante para esos bebés, sus primeros 8 días de vida: el Programa parental para papás, que brinda a nuestros empleados 3 días más de los que dicta la ley.