Dinamismo:
Muestra entusiasmo y trata de involucrarte en todas las actividades que puedas.
Proactividad:
Pregunta siempre si puedes ayudar en algo, ¡no esperes que alguien te diga qué hacer!
Ganas de aprender:
Aunque no tengas mucha experiencia, anímate a aprender, ¡es la forma de ganarla!
Creatividad:
Cualquier tarea puede ser interesante si le das la vuelta para hacerla de una forma distinta. Resolver problemas de forma propositiva, también es sinónimo de creatividad.
Puntualidad:
Respeta los horarios de la empresa y adáptate a los tiempos de tus compañeros.
Planeación:
Piensa desde ya qué te gustaría hacer luego de la práctica; si sigues en la empresa, puede ser de gran ayuda para tu desempeño profesional. Eso es lo que se llama tu marca personal, entérate de qué se trata aquí.
Actitud:
¿Te consideras una persona simpática y positiva o una apática y quejetas? ¡Adivina a cuál prefieren en una empresa!
Responsabilidad:
Cumplir con tus tareas a tiempo es una gran cualidad que las empresas valoran, ¡desarrolla esta cualidad!
Hoja de vida:
Si quieres ser seleccionado, necesitas tener una buena hoja de vida; además, ahora que estás comenzando tu vida profesional, es importante que empieces a recopilar tus logros y experiencias para ir construyéndola. ¿Quieres saber cómo?
¿Cuáles cualidades tienes y cuáles te faltan? Todavía tienes tiempo de desarrollarlas para hacer tus prácticas universitarias con nosotros.